"Peregrina paloma imaginaria
que enardeces los últimos amores;
alma de luz, de música, de flores,
peregrina paloma imaginaria".
Jaime Freyre.
Ayeres y mañanas
setenta y tres otoños,
un edén de colores
el bermejo, el verdemar,
el limonado
son ahora
un velo con frescura de lluvia
un rumor de agua cantarina .
Allá vuela mi alma
delicada como el nardo.
Yo soy una nostalgia.
Sopla el viento del atardecer.