PATRIA.
¡AY, PATRIA mía !
¿ Qué han hecho de tí ?
Eras ese pañuelito de lino blanco
y fino encaje
bordado con rositas rococó
delicado, finísimo ...
te han vuelto un bollito incoloro
rociado en lágrimas de sal.
Aún así
Te amo.
Eres mi corazón.
Eres mi casa.
Guardan mis ojos
el atlas vivo de tu territorio
tu extensa y bella geografía.
Te recuerdo
dulce y valiente
cobijando mi alma.
Te recuerdo
en mi guardapolvo blanco
en las estrofas de "Aurora"
izando tu bandera,
en las caritas de sol de mis alumnos
en el parto de mis hijos,
en los brotes tiernos de mis nietos.
Te recuerdo en los:
POR FAVOR - GRACIAS - PERMISO
Y tanto más.
No quisiera irme sin sentirte
una vez más, como ayer
elogiando tu distinción
en una conferencia de palabras
que sean verdad y vida.
¡Ay, PATRIA mía !
Te amo
Eres mi corazón.
Eres mi casa.
