HOGAR
¿Quién se ha robado
aquel HOGAR de pura risa
donde siempre florecía
la albahaca y el romero ?.
¿ Qué congoja me ata al caserón ?.
Mi HOGAR ahora es quieto
una semilla pura espera
y es que respira despacito.
Sólo germina
en las mañanas ambarinas.
En los atardeceres
se convierte en un arrullo
de pájaro cansado
que con sus lentos trinos
tararea
sólo para mí.
Mi alma ya ha sufrido
todo lo que puede
y habituada a su destino
se acurruca
mirando arder a las candelas
aspirando el sándalo y el benjuí
agradecida de seguir viviendo.
Cuando llega la noche
escondo mi cabeza
entre almohadas de plumas
y sueño que llegó mi hijo.
Entonces las paredes de mi casa
se recubren de jade
las cortinas ondulantes vuelan y vuelan
y en el pequeño comedor
todas las sillas
tienen dueño.