domingo, 29 de julio de 2012

EL DIAMANTE Y EL BAMBÜ.

   No hay estrellas ...
   La noche se ha colocado una oscura capa, embellecida
con hilos de luna, con matices de tenues colores
y arabescos caprichosos.
   A lo lejos ... una sola burbuja
un solo temblor.
   Los pájaros guardan silencio, al abrigo de sus alas medrosas.
   A través del cristal biselado, una vara de bambú
esconde su belleza, su altivez, su finura, los detalles susurrantes.
   Lentamente se aquietan los pensares, los sueños ausentes,
el doloroso extrañamiento.
   No hay estrellas ...sólo el bellísimo diamante
tallado en sus rayos de eternidad.
  Y una vara de bambú, que no es una cualquiera.
   La vara de bambú de la buena suerte.


          LA PALABRA ESPERANZA RESUCITA.